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Segundo día del estudiante sin retorno a clases
Miles de estudiantes en Panamá todavía no han podido retornar a las clases presenciales, la mayoría siendo de escuelas públicas.
Hoy, el día del estudiante en Panamá se celebra una vez más con una importante cantidad de escuelas cerradas, después de que en marzo de este año llegáramos a ser el país con el cierre escolar más prolongado.
La crisis educativa ha sido uno de los fenómenos más sobresalientes desde que inició la pandemia, resultado de las faltas de un sistema deficiente, con cientos de miles de estudiantes recibiendo clases de manera remota y cuyos padres denunciaron que la educación suministrada no era de calidad.
Como resultado de las peticiones por parte de la población y después de una larga lista de «fechas tentivas» para el regreso a clases, a partir del tercer trimestre de este año, algunas escuelas que podían contar con las medidas de bioseguridad (en su mayoría privadas), pudieron retornar a clases de manera semipresencial con una capacidad del reducida, bajo la aprobación del MEDUCA. Las causas para que ciertas escuelas públicas no estuvieran listas para el regreso a clases eran la falta de agua en las mismas y problemas con sus instalaciones o infraestructuras, problema que vemos todos los años antes de iniciar el año escolar, incluso antes de la pandemia.
Inclusive, la población de estudiantes que representan las escuelas públicas presenta un gran número, especialmente después de las recientes cifras con más de 14 mil estudiantes que tuvieron que transladarse del sistema educativo privado al público como resultado del impacto económico del COVID-19 y esto es sin contar a todos los que tuvieron que desistir de sus estudios por no tener acceso a internet o dispositivos digitales.
Aunque el MEDUCA haga mucha propaganda respecto al «exitoso regreso a clases», todavía hay una importante cantidad de estudiantes que no han podido retornar a las clase y lo más posible es que no lo puedan hacer hasta el 2022. Todavía están por verse las fuertes y graves afectaciones en la educación y el desarrollo de los niños y jóvenes después de 2 años sin regresar al colegio.